[Washington, Estados Unidos] [El último informe de la inteligencia estadounidense indica que Irán está realizando investigaciones que podrían capacitar al país para construir una bomba atómica, pero no ha intentado hacerlo. Programa de armas nucleares fue abandonado en 2003.]
[Ken Dilanian] Mientras funcionarios estadounidenses e israelíes hablan públicamente sobre la perspectiva de un ataque militar contra el programa nuclear de Irán, se pasa a menudo un hecho por alto: las agencias de inteligencia estadounidenses no creen que Irán esté tratando activamente de construir una bomba atómica.Una evaluación estrictamente confidencial de la inteligencia estadounidense, que circuló entre personeros a principios del año pasado, avanza esa opinión, expresada originalmente en 2007. Ambos informes, conocidos como Evaluaciones de la Inteligencia Nacional, concluyen que Teherán paralizó los planes para desarrollar y construir una ojiva nuclear en 2003.
El informe más reciente, que representa el consenso de dieciséis agencias de inteligencia estadounidenses, indica que Irán está realizando investigaciones que podrían posibilitar que el país construya un arma nuclear, pero que no ha intentado hacerlo.
Aunque Irán continúa enriqueciendo uranio a bajos niveles, los funcionarios estadounidenses dicen que no han visto evidencias que les obligue a revisar esa conclusión. Altos funcionarios estadounidenses dicen que Israel no pone en discusión ni los datos de inteligencia reunidos ni el análisis.
Pero Israel parece tener un umbral más bajo para la acción que Washington. El país considera a Irán como una amenaza para su existencia y dice que no permitirá que Irán sea capaz de construir y usar un arma nuclear. Algunos funcionarios israelíes han planteado la perspectiva de un ataque militar para detener a Irán antes de que sea demasiado tarde.
No está claro cuánta penetración tiene en Irán la inteligencia estadounidense, un problema que ha afectado sus intentos de determinar si Iraq tenía armas de destrucción masiva antes de la invasión norteamericana de 2003.
La conclusión de que Sadam Husein había acumulado secretamente reservas de armas químicas y biológicas y estaba tratando de construir un arma nuclear, y que fue utilizada por el gobierno de George W. Bush para justificar la invasión, resultó ser falsa.
Irán impidió esta semana que inspectores de la Agencia Internacional de energía Atómica, la organización de control nuclear de Naciones Unidas, visitaran Parchin, un recinto militar, para determinar si unas pruebas explosivas estaban relacionadas con el desarrollo de tecnología nuclear.
El informe de la AIEA de noviembre menciona “serios temores” sobre “posibles dimensiones militares del programa nuclear de Irán”, pero no extrae conclusiones definitivas. Otro informe de la IAEA es inminente.
El jefe supremo de Irán, Ayatola Alí Jamenei, insistió el miércoles que Teherán no tiene intenciones de producir armas nucleares. En observaciones transmitidas por la televisión local, dijo que “poseer un arma nuclear es un gran pecado”.
Pero agregó que “las presiones, sanciones y asesinatos” no impedirán que Irán produzca energía nuclear para fines pacíficos.
Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto estrictas sanciones sobre el petróleo y el sector bancario iraní, y asesinos no identificados en motos han asesinado a varios científicos nucleares de Irán, atentados que Teherán atribuye a Israel.
De momento, las fuerzas armadas y funcionarios de la inteligencia estadounidense dicen que no creen que los dirigentes iraníes hayan tomado la decisión de construir una bomba.
“Creo que se mantienen en una posición en la que podrían tomar esa decisión”, dijo a la Comisión de las Fuerzas Armadas del Senado, James R. Clapper Jr., director de Inteligencia Nacional, el 16 de febrero. “Pero hay ciertas cosas que no han hecho y que llevan no haciendo por algún tiempo”.
Clapper y el director de la CIA, David H. Petraeus, declararon en una sesión del Senado, que Irán estaba enriqueciendo uranio por debajo del veinte por ciento de pureza. El uranio es considerado apto para uso militar cuando se lo enriquece al noventa por ciento de pureza, aunque todavía es potencialmente utilizable a niveles más bajos de enriquecimiento.
Las agencias de espionaje de Estados Unidos no han visto evidencias de una estructura de toma de decisiones sobre armas nucleares en el entorno de Jamenei, dijo David Albright, el que encabeza la organización sin fines de lucro Instituto para la Ciencia y la Seguridad Internacional y es un experto en el programa nuclear de Irán.
La organización de Albright calcula que con las centrífugas que ya posee Irán, podría enriquecer uranio a un nivel de pureza suficiente como para hacer una bomba en hasta seis meses, si lo decidiera.
No se sabe con precisión qué otros obstáculos técnicos deberá superar Irán, pero Albright y numerosos expertos creen que si decide proceder, el país tiene el conocimiento científico para diseñar y construir una bomba rudimentaria, pero operativa, en un año. Según calculó Albright, a Irán le tomaría hasta tres años construir una ojiva suficientemente pequeña como para encajar en un misil balístico.
Albright dijo que un intento de Irán de construir un arma nuclear probablemente sería detectado.
El secretario de Defensa, Leon E. Panetta, ex director de la CIA, contó a una comisión de la Cámara que esa decisión sería una “línea roja” que exigiría una respuesta internacional.
Stephen Hadley, que fue asesor de seguridad nacional del presidente Bush, dijo que entonces sería demasiado tarde como para responder.
“Lo más difícil de ver será cuando estén armando la bomba”, dijo Hadley, ahora asesor en el Instituto de Paz de Estados Unidos, un laboratorio ideológico financiado por el gobierno.
Algunos desarrollos han reforzado la opinión de que Irán está tratando de construir una bomba en secreto.
En 2005, agencias de inteligencia occidentales descubrieron una instalación subterránea clandestina llamada Fordow, cerca de la ciudad de Qom, que se dice es capaz de albergar tres mil centrífugas para enriquecer uranio.
Israel teme que esas instalaciones puedan ser invulnerables ante un bombardeo convencional si Irán empieza a construir un arma. Funcionarios israelíes han advertido que Irán podría crear lo que llaman una “zona de inmunidad” para fines de año.
Y algunos funcionarios estadounidenses han llegado a diferentes conclusiones sobre la inteligencia. Entre ellos está el representante Mike Rogers, republicano de Michigan, que es presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara. “Sabemos que Irán está impulsando agresivamente un programa de armas nucleares”, dijo Rogers este mes.
La inteligencia estadounidenses sobre las ambiciones nucleares ha vacilado durante años. Después de que en 2002 disidentes iranés revelaran un programa mantenido oculto durante largo tiempo, la inteligencia estadounidense advirtió que Teherán estaba “determinado a construir armas nucleares”.
En 2006, Bush pidió a sus asesores que le presentaran opciones para un ataque estadounidense. Pero informantes reclutados hace poco, interceptaron conversaciones y notas de conversaciones de funcionarios iraníes que llevaron a la inteligencia estadounidense a reconsiderar su advertencia.
En diciembre de 2007, la Evaluación Nacional de Inteligencia juzgó como muy fiable la información de que Teherán había paralizado su programa de armas nucleares en el otoño de 2003. Juzgó con “confianza moderada a alta que Teherán como mínimo mantiene abierta la opción para desarrollar armas nucleares”.
En sus memorias de 2010, ‘Decision Points’, Bush se preguntó si acaso los analistas habían cambiado de opinión para expiar sus errores en Iraq.
Michael Hayden, que fue director de la CIA en 2007, dijo que los analistas que escribieron el informe no tenían motivos políticos. “Son profesionales que se basaron en lo que vieron”, dijo en una entrevista.
Dijo que la evaluación de 2007 estaba mal redactada y que “se tradujo rápidamente en que Irán había detenido su programa nuclear”, que no cree que sea correcta.
La conclusión más importante, dijo Hadley, era que Irán continuaba sus esfuerzos para desarrollar material fisible para construir misiles balísticos capaces de transportar ojivas nucleares.
“Están haciendo todo lo posible para mantenerse en una posición en que puedan tener una ruta clara y relativamente rápida hacia las armas nucleares”, dijo.
25 de febrero de 2012
©los angeles times
cc traducción c. lísperguer