[Washington, Estados Unidos] [Estados Unidos ofrece adiestramiento y otras formas de ayuda a la oposición armada siria, incluyendo a las organizaciones paramilitares.]
[Mark Landler y Michael R. Gordon] Estados Unidos está intensificando de modo significativo su apoyo a la oposición siria, informaron altos funcionarios de gobierno el miércoles, ayudando a adiestrar a los rebeldes en una base en la región y ofreciendo por primera vez a grupos paramilitares asistencia no letal y equipos que podrían reforzar su campaña militar.
La misión de adiestramiento, que ya empezó, representa la intervención estadounidense más significativa en el conflicto sirio, aunque el tamaño y el alcance de la misión no están claros, como tampoco el país anfitrión. El ofrecimiento de asistencia no letal lo dará a conocer el secretario de Estado John Kerry en una reunión en jueves en Roma con líderes de la oposición. También se espera que Kerry aumente la expectativa de ayuda económica directa, aunque los funcionarios advirtieron que la Casa Blanca todavía tenía que autorizar todos los elementos.
Antes de llegar a Roma el miércoles, Kerry declaró en París que la oposición siria necesitaba asistencia adicional e indicó que Estados Unidos y sus aliados estaban dispuestos a entregar parte de esa ayuda.
Bajo la amplia definición de “no letal”, la asistencia a la oposición podría incluir cosas como vehículos, equipos de comunicación y de visión nocturna. El gobierno de Obama dijo que de momento al menos no entregará armas a la oposición.
Un objetivo importante del gobierno es ayudar a la oposición a construir su credibilidad dentro de Siria proporcionando servicios básicos tradicionales a la población civil. Desde que estallara el conflicto hace dos años, Estados Unidos ha enviado 365 millones de dólares en ayuda humanitaria a Siria. Funcionarios estadounidenses han expresado su creciente preocupación de que miembros extremistas de la oposición al gobierno del presidente Bashar al-Assad, especialmente el Frente Al Nusra, que según Estados Unidos es una organización afiliada de al Qaeda, se apoderen de partes de Siria y consoliden su autoridad mediante la entrega de servicios públicos, tal como ha hecho Hezbolá en el Líbano.
“Algunas personas en el terreno, a las que no apoyamos y cuyos intereses no coinciden con los nuestros, están entregando esa ayuda”, dijo Kerry.
Para reducir el poder de las organizaciones extremistas, Estados Unidos quiere ayudar al Consejo Nacional Sirio, la coalición de líderes de la oposición siria a la que ayuda y ayudó a organizar, a entregar servicios básicos en zonas que han sido recuperadas del control del gobierno sirio.
Otro importante objetivo de la ayuda es impulsar las negociaciones sobre una transición política, indicando al presidente Assad que finalmente son los rebeldes los que prevalecerán.
“Tiene que saber que no puede resolver este conflicto a tiros”, dijo Kerry sobre Assad.
El más importante cambio en la política exterior, dijeron funcionarios, no es solamente el tipo de equipo que será enviado a la oposición armada, sino también quiénes serán los receptores.
Hasta ahora, nada de la ayuda que ha otorgado Estados Unidos ha sido enviada a los combatientes del Ejército Libre de Siria, que están luchando contra el gobierno sirio. Más bien, la distribución de la ayuda se ha limitado a los consejos locales y a organizaciones no armadas. Pero esto cambiaría si el gobierno ampliara su ayuda.
Lo que queda fuera de la mesa, por lo menos en lo que concierne a la Casa Blanca, son las armas. El año pasado el presidente Obama rechazó una propuesta de la Central de Inteligencia Americana, el Departamento de Estado y el Pentágono de armar a un selecto cuadro de rebeldes. Funcionarios estadounidenses indicaron el miércoles que la Casa Blanca todavía se opone a la entrega de armas.
Sin embargo, un funcionario dijo que la ayuda económica que Estados Unidos pensaba enviar a la oposición podría ayudar indirectamente a que los rebeldes se armaran por sí mismos, ya que se liberarían otros fondos para la compra de armas.
Estados Unidos no es el único país que está planeando enviar ayuda no letal a organizaciones paramilitares. La semana pasada, la Unión Europea aceptó una propuesta británica para enviar equipos no letales. Gran Bretaña y otros miembros están en estos momentos discutiendo precisamente qué tipo de equipos serían permitidos según los términos de la decisión europea.
“Frente a los crímenes y la amenaza de inestabilidad, nuestra política exterior no puede estar estática mientras pasa el tiempo”, dijo en ministro de Exteriores británico, William Hague, después de una reunión con Kerry en Londres el lunes. “Debemos aumentar de manera importante el apoyo a la oposición siria. Nos estamos preparando para hacer eso”.
El ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, también llamó a aumentar el apoyo a la oposición después de una reunión con Kerry en París el miércoles, aunque no especificó qué tipo de ayuda piensa proporcionar Francia.
“Si queremos un nuevo régimen, tenemos que fomentar la oposición”, dijo Fabius. “Tenemos que hacer que la situación cambie”.
Los comentarios del secretario de Estado y personeros aliados han generado considerable expectativas para la reunión del jueves, a la que asistirá Moaz al-Khatib, líder de la coalición de la oposición siria, y otros miembros de la coalición.
A principios de la semana, Khatib había rechazado asistir a la reunión, reflejando la profunda decepción de la oposición siria sobre lo que cree que es la incapacidad de importantes potencias de ayudarla en su intento de derrocar al gobierno de Assad. Pero cedió después de una llamada telefónica de Kerry, que fue seguida por otra llamada del vicepresidente Joseph R. Biden Jr.
La reunión de Kerry con Khatib será su primera con el líder de la oposición siria. Kerry dijo que el aporte de la oposición permitiría que el gobierno evaluara los pasos a emprender.
Entre las preguntas sin respuesta está cómo podría la ayuda estadounidense adicional ser canalizada hacia las organizaciones paramilitares. Si fluye a través del Consejo Militar Supremo afiliado a la coalición de la oposición siria, dijeron algunos expertos, podría no llegar a las organizaciones armadas que están logrando los avances más importantes contra el gobierno sirio.
“El problema es que el Consejo Militar Supremo no tiene tentáculos en el terreno”, dijo Andrew J. Tabler, experto en Siria e investigador del Institute for Near East Policy, de Washington. “Si sólo les das gasa y chalecos antibalas, podría no ser tan importante”.
Sin embargo, Tabler dijo que la decisión del gobierno de dar este paso era un claro indicio de que su política de mantenerse apartado de todo tipo de intervención militar en el conflicto no era sostenible.
“Todavía están reticentes, así que están avanzando poco a poco”, dijo. “Pero el gobierno de Obama tiene que ver la realidad: lo que están haciendo no funciona”.
[Mark Landler informó desde Washington, y Michael R. Gordon desde Roma.]
2 de marzo de 2013
28 de febrero de 2013
©new york times
cc traducción @lisperguer