[Estados Unidos] [¿Deberían las mascotas ser admitidas en los hospitales?]
[Judy Molland] ¿Le gustaría que su mascota le visitara si estuviera usted en el hospital?
No estoy hablando de los asombrosos perros de consuelo que actualmente están en Boston y llevan solaz a personas en la calle en los alrededores de la maratón y visitan a los heridos en los hospitales del área.
No, estoy hablando sobre el creciente número de hospitales que permiten mascotas personales en los cuartos de los pacientes.
Muchas instalaciones médicas permiten visitas de animales de terapia adiestrados, pero hasta hace poco no toleraban que las verdaderas mascotas de los pacientes pasaran a saludar.
Pero eso está cambiando a medida que algunos hospitales deciden que las ventajas emocionales para los pacientes superan los riesgos.
Leemos en el New York Times que “el Centro Médico de la Universidad de Maryland en Baltimore permite que las mascotas de la familia visiten a sus dueños, provisto que se cumplan ciertos requisitos, como hace igualmente la Universidad del Hospital de Iowa y clínicas de Ciudad Iowa; el Centro Médico de la Universidad de Virginia en Richmond; el Centro Médico de la Universidad Rush en Chicago; dos hospitales asociados con la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota; y más de una decena de otros centros médicos.
En Long Island, el Hospital Universitario North Shore permite que las mascotas personales permanezcan con pacientes todo el día en su unidad de cuidados paliativos de diez camas, como hace el Hospice Inn, una residencia independiente de dieciocho camas que es parte del Sistema de Salud North Shore-LIJ.
Por supuesto hay reglas. Un doctor tiene que aprobar la visita, y debe haber un certificado de un veterinario de que el animal está sano y tiene las vacunas al día. La mayoría de las visitas animales son perros, y por lo general la mayoría de las instituciones exigen que sean cepillados en el primer día de visita. Deben ir con correa cuando transiten por los pasillos del hospital; los gatos deben transportarse en transportador.
Normalmente, perros y gatos son los dos únicos tipos de mascota admitidos, pero tampoco pueden pasar ahí la noche.
En general, los hospitales no han informado sobre problemas serios.
En el Chicago Tribune leemos que “la Reverenda Susan Carole Roy, directora de servicios de cuidado pastoral en el Centro Médico de la Universidad de Maryland, tampoco informa sobre problemas desde que el hospital empezara su programa de visitas animales en 2008.
“Nuestras mascotas son parte integral de nuestras vidas diarias, y comparten nuestras mayores alegría y momentos más tristes”, dijo Roy. “Que los pacientes se puedan volver a conectar con sus mascotas –incluso por un corto periodo de tiempo- puede ser muy importante. Les permite estar en contacto con una parte de sus vidas que a menudo se pierde cuando se transforman en pacientes”.
Sin embargo, hay algunas excepciones. A principios de año escribí sobre una mujer embarazada en el Reino Unido que quería tener a su lado a su perro Barney en la sala de partos durante el parto. Después del parto de dos horas, Barney, que se cree es un Labrador amarillo, permaneció junto a la mujer, su novio y la partera, hasta que la familia se marchó con el recién nacido.
No estos estuvieron de acuerdo. Varias enfermeras y doctores en el hospital expresaron su disgusto ante la idea de que hubiera un perro en el pabellón de la maternidad.
No todas las mascotas son admitidas. Las ratas, jerbos, tarántulas, serpientes, han sido mascotas en mi casa en muchas ocasiones, gracias a mis hijos, pero no me gustaría verlas acercarse a mi lecho de enfermo.
¿Qué cree usted? ¿Deben las mascotas ser admitidas en hospitales para visitar a sus dueños enfermos?
27 de abril de 2013
25 de abril de 2013
©care2
cc traducción c. lísperguer