quién decide qué investigar
[Estados Unidos] [Los políticos quieren determinar qué se investiga].
[Estados Unidos] [Los políticos quieren determinar qué se investiga].
[Estados Unidos reconoce asesinato de cuatro ciudadanos estadounidenses en operaciones contraterroristas].
[Argentina] [Hasta sus mandantes abandonaron a Videla. “Símbolo de la dictadura militar” lo llamó La Nación. Para Clarín fue “ideólogo del terror de la peor dictadura”. Estos titulares reflejan el abandono de los asesinos por sus mandantes. Sin embargo, al morir el viernes, sólo tenía una condena, lo cual muestra las deudas de la Justicia. Tanto los autores de los crímenes de lesa humanidad como los familiares de sus víctimas están muriendo de viejos sin que haya pronunciamientos judiciales en firme. Atronador silencio de la jerarquía eclesiástica.]
[Colombia] [Pese a la eliminación de la agencia, siguen denuncias de chuzadas ilegales, dicen en el Congreso.]
[Washington, Estados Unidos] [¿Cómo un ciudadano estadounidense se convirtió en un renegado de Estados Unidos? En la imagen, las ruinas de un coche en la provincia de Shabwa, como testamento de la capacidad anuquiladora de los ataques con drones norteamericanos.]
[Washington, Estados Unidos] [Informe secreto eleva la alarma sobre los puntos ciegos de inteligencia debido al énfasis puesto en al Qaeda].
[Brasil] [Dentro de dos años llegaran a ser un millón los documentos a cargo de la Comisión de la Verdad paulista. Brasil liberó miles de archivos de la dictadura. El Portal de la Memoria Política y la Resistencia presentado ayer en San Pablo contiene 274.105 fichas personales y 12.874 informes sobre diversos temas, como la visita a una cárcel clandestina de Claris Haliwell, un funcionario norteamericano.]
[El asesinato selectivo de ciudadanos estadounidenses aprobado por el gobierno de Estados Unidos es inquietante, pero una revisión judicial ayudaría. Es un signo de nuestra época que se discuta en público el asesinato de ciudadanos sin que el gobierno deba justificar, más allá de toda duda, sus motivos. Hoy, el gobierno puede asesinar a ciudadanos sin acusarles de nada en específico y obliga a los otros poderes, y a la ciudadanía, a creer en sus motivos. Editorial LAT.]